Internacional

Más de 100 de los ex secretarios de la jueza Ginsburg rindieron homenaje en la Corte Suprema

CNN.- La jueza Ruth Bader Ginsburg  regresa por última vez a la Corte Suprema esta mañana, y un ejército de más de cien de sus antiguos secretarios se reunieron con el ataúd y lo acompañaron por los escalones de piedra que conducen al gran salón.

Además de su familia y opiniones escritas, los empleados de Ginsburg son su legado más duradero. Comenzaron su mandato como abogados jóvenes sin experiencia y emergieron con credenciales legales incomparables que marcarán sus currículums de por vida: secretarios de la Corte Suprema.

Pero para muchos, trabajar para Ginsburg no fue solo una lección criminal. También inculcó la belief de que las mujeres podían tenerlo todo, pero tal vez no al mismo tiempo. Elogiaba a su «compañero de vida», a su marido, Marty, «el único hombre», decía, a quien «le importaba que yo tuviera cerebro»

Cuando la jueza Ruth Bader Ginsburg regrese por última vez a la Corte Suprema el miércoles, un ejército de más de cien de sus ex secretarios se reunirá con el ataúd y lo acompañará por los escalones de piedra que conducen al gran salón donde el liberal presidió el icono durante casi 30 años.

La Corte Suprema, construida sobre precedentes y arraigada en la tradición, honrará a Ginsburg en una ceremonia privada y luego en una vista pública, pero sus antiguos secretarios, que montan guardia, no abandonan el ataúd.
Cuando el ataúd llegó a la corte, algunos de sus secretarios sirvieron como portadores honorarios del féretro mientras que el resto se alineó en los escalones del edificio. Se espera que alrededor de 120 secretarios de sus días en la corte de apelaciones y en la Corte Suprema se reúnan en la corte.
Además de su familia y opiniones escritas, los empleados de Ginsburg son su legado más duradero. Comenzaron su mandato como abogados jóvenes sin experiencia y emergieron con credenciales legales incomparables que marcarán sus currículums de por vida: secretarios de la Corte Suprema.
Pero para muchos, trabajar para Ginsburg no fue solo una lección criminal. También inculcó la belief de que las mujeres podían tenerlo todo, pero tal vez no al mismo tiempo. Elogiaba a su «compañero de vida», a su marido, Marty, «el único hombre», decía, a quien «le importaba que yo tuviera cerebro».
La justicia, que period una noctámbula, una fanática del derecho administrativo y amiga cercana de su opuesto ideológico, el difunto juez Antonin Scalia , fue un modelo a seguir tanto en la ley como en la vida.

 

Fuente: Más de 100 de los ex secretarios de la jueza Ginsburg rindieron homenaje en la Corte Suprema se publicó en n.com.assemble

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